The following text is not a historical study. It is a retelling of the witness’s life story based on the memories recorded in the interview. The story was processed by external collaborators of the Memory of Nations. In some cases, the short biography draws on documents made available by the Security Forces Archives, State District Archives, National Archives, or other institutions. These are used merely to complement the witness’s testimony. The referenced pages of such files are saved in the Documents section.

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Rafael Vilches Proenza (* 1965)

Quiero vivir como poeta, en Cuba libre y, no estar secuestrado en la puerta de mi casa

  • nació el 10 de diciembre 1965 en la provincia de Granma, República de Cuba, en finca de su abuelo, de la cual fueron obligados a mudarse a un poblado cercano

  • al terminar su carrera de Ingeniero de Riego y Drenaje en 1985, fue enviado al servicio militar a la provincia de Guantánamo, dónde operaba como explorador y guardia durante dos años

  • después del ejército estudió licenciatura de la Educación Artística con la especialidad en Artes Plásticas, es también egresado del “Centro de Formación Literaria Onelio Jorge Cardoso”

  • en 1996 escribió su primera novela “Ángeles desamparados”, publicada en 2001 en Miami, tocando el tema de las becas estudiantiles en los seminternados cubanos

  • en la segunda mitad de los noventa empezó a asistir a diferentes talleres literarios y, así se acercó a las instituciones oficialistas de cultura, entre ellas el “Centro Provincial del Libro” en Villa Clara, o el “Centro de Investigación del Sectorial Provincial de Cultura” en Holguín

  • durante varios años se desempeñó como el presidente de la “Asociación Hermanos Saíz” [AHS], organización estatal supuestamente apoyando a los artistas y a los escritores jóvenes

  • en 2009 fue expulsado de la “Unión de Escritores y Artistas de Cuba” por su relación con los escritores independientes

  • en 2010 ganó el “Premio Nacional de Poesía” en la ciudad de Holguín

  • en diciembre 2020 ganó el “Premio de Narrativa Reinaldo Arenas” con su libro “Sálvame si puedes”

  • tienen una cuantiosa suma de libros publicados en el extranjero, sin embargo, en su patria vive perseguido y amenazado de la muerte por el régimen comunista

Českojazyčná verze textu následuje po španělské verzi:

“Cada uno es responsable de la actitud que toma ante la sociedad, ante lo que está pasando, ante el régimen comunista, ante lo que está haciendo la dictadura cubana con el pueblo y con los artistas”, exclama escritor y poeta Rafael Vilches Proenza, quien ha ganado varios premios de literatura nacionales e internacionales, pero al mismo tiempo está perseguido por crítica del Gobierno cubano.

Pueblos cautivos

Rafael Vilches Proenza nació el 10 de diciembre 1965 en finca de su abuelo, en el municipio Vado del Yeso, provincia Granma, República de Cuba. En mayo 1970 el Gobierno cubano trasladó a los habitantes del poblado a un pueblo cercano. Así mudaron a muchas familias de la zona de Sierra Maestra, para asegurarse que no se repetiría el alzamiento de Escambray[1], llamado también como la “Lucha contra Bandidos” que, ocurrió entre años 1959 y 1965. “Fidel Castro sacó a todos los habitantes de ahí - rurales, rebeldes, campesinos, y los trasladaron a los poblados con edificios ´regalados´, que tenían televisor, refrigerador lleno de comida, pero campesinos tenían que abandonar a sus casas, sus animales, todo. Era una manera de abusar”, explica Rafael. Su madre trabajaba en una escuela y su padre era operador de tractores, laborando en la zafra [cosecha de la caña de azúcar y la época durante la que se realiza]. “Mi infancia no fue feliz, no recuerdo tener un juguete bonito, solo muñecos de yeso. Tuve una infancia de mucha miseria y, sobre todo de mucha hambre. Era muy triste. Para un niño esas cosas son muy importantes, comer fruta, helado, buena comida, festejar cumpleaños. Yo nunca pude festejar mi cumpleaños”, rememora Rafael y añade: “Cuando las madres querían comprar un juguete para el Día del Niño, tenían que pasar ese día en la fila, para que les dieran un turno. Algunos tenían posibilidades de comprar los turnos. A mi madre le tocaban los números más altos, si no hacías uno de los primeros turnos, no te tocaba un coche lindo, una pistola, etc. Igual para la ropa”.

Campo de concentración para menores

Los estudios de secundaria impactaron a Rafael de una manera negativa. Obtuvo una beca en seminternado y, como otros alumnos, fue separado de su núcleo familiar: “En una edad cuando el niño necesita más que nunca a sus padres, porque está cambiando de su manera de pensar, su manera de ser…aquello fue como estar en una cárcel. Una cárcel para menores, un campo de concentración para menores”, recuerda adolorido los años violentos de su adolescencia, tan violentos: “Como vivir y ver cómo los profesores se acostaban con las niñas menores de edad. Había una banda que dirigía un profesor, uno temía dormirse en la noche”, relata. En aquella época Rafael escribió su primer cuento, sin percatarse, sin darse cuenta. Su mama era una gran contadora de historias y su padre de chistes, su abuelo un gran improvisador y sus tíos revelando historias muy escénicas; así pasaban las noches en casa de sus abuelos. En 1980 comenzó a estudiar el “Instituto Politécnico de Agronomía”, para convertirse en el Ingeniero de Riego y Drenaje. Su novia de ese tiempo, quien era al mismo tiempo su maestra, le empezó a pasar libros y revistas soviéticas, norteamericanas, británicas y francesas. Rafael se dedicó a la poesía de amor, por lo cual le prohibieron entrar al Taller Literario de su pueblo, porque no estaba comprometido con los temas de la “Revolución Cubana”[2].

Servicio militar en Guantánamo

En 1985 Rafael comenzó su servicio militar en la provincia de Guantánamo, dónde pasó dos años como explorador y guardia en el perímetro fronterizo en la parte de la ciudad de Caimanera. “Era muy triste, escuchando explotar las minas, pero no sabíamos si era iguana, venado o una persona. Eran dos años bastante tristes. Al otro lado tuvimos a los norteamericanos, hombres grandes, fuertes, nosotros éramos apenas niños, jóvenes, inocentes, era una etapa cruel”, describe y agrega: “Muchos soldados jóvenes intentaron nadar por la Bahía de Guantánamo o por el mar, lograban llegar a la ´Base Naval de los EE.UU.´, otros decidieron brincar las minas, pero las minas los mataron o los dejaron inválidos”. Puede parecer irónico, pero los años ochenta se conocen como “la época dorada del castrismo”, incluso Rafael los recuerda así: “Era momento de cuando no pasé hambre, por primera vez en mi vida. El refrigerador era siempre lleno. Yo era super gordo, al ejército nos llegaba jamón, queso de importación, había de todo. Viví una etapa de alejado de todo lo que estaba pasando en la sociedad y en la política”. Del ejército salió después de dos años, en 1987, y quería estudiar carrea Agro-energética en la Preparatoria Militar, pero no aprobó a los exámenes. Decidió estudiar licenciatura de Educación Artística con la especialidad en Artes Plásticas en Santiago de Cuba. Rafael es también egresado del “Centro de Formación Literaria Onelio Jorge Cardoso”. En la época de su estadía en Guantánamo y en Santiago de Cuba visitaba frecuentemente a las librerías y empezó a armar su biblioteca personal.

Cualquiera de nosotros se podía morir de hambre

En el principio de los años noventa Rafael vivía en casa de sus padres, junto con su primera esposa y su primer hijo. “Fueron años terribles, vivía en Santa Clara, cualquiera de nosotros se podía morir de hambre, mi madre estaba haciendo magia, cuando al agua echaba arroz, frijoles, chícharo, hacía una masa que comíamos. Mi padre ya dejó de trabajar como tractorista, trabajaba como ayudante en una panadería, eso nos salvó la vida”, describe el periodo especial[3], una crisis socioeconómica que afectó a toda la isla. En 1996 escribió su primera novela los “Ángeles desamparados”, que fue publicada en Miami en 2001. Su novela acerca el tema de la beca estudiantil, del encierre, de la educación estatal fracasada. Rafael empezó a asistir a los talleres de literatura y, así se acercó al “Centro Provincial del Libro” en Villa Clara, con la cual colaboró varios años. Después se incorporó al “Centro de Investigación del Sectorial Provincial de Cultura” en Holguín, hasta que se convirtió en el presidente de la “AHS” [Asociación Hermanos Saíz], una institución oficial, que se presenta como una organización sin fines de lucro, dirigida por la “Unión de Jóvenes Comunistas”. “Ya tenía relación con los artistas de la zona, de todo el país. No se publicaban libros en aquel tiempo, antes del 2000, era muy caótico, no se podía. Uno estaba tratando de escribir la obra más que publicarla”, explica Rafael y revela su punto de vista actual sobre “AHS”: “Representa una manera de controlar a los artistas y a los escritores, cuando empiezan con sus primeros pasos. Manipulan a los jóvenes… No sé si ellos son conscientes de que esto está pasando, o esto se hace a espalda de ellos“.

Quiero vivir como un poeta

En 2000 Rafael salió del “Centro Provincial del Libro”, ya que empezó a observar a la manipulación que existía entre los escritores y los artistas. “Fui testigo de muchas cosas, sobre todo de falta de respeto”, rememora. En 2009 Rafael fue expulsado de la “Unión de Escritores y Artistas de Cuba”, por su amistad y colaboración con los escritores independientes y con los espacios alternativos. En 2010 recibió el “Premio Nacional de Poesía”. Rafael subraya que en aquel momento comenzó la “guerra de chocar” con el sistema comunista de Cuba, al lado de sus amigos intelectuales sin máscara. Rafael empezó a publicar en las revistas que critican al régimen, como “Pensamiento Plural”, entre otros. “Empiezo a moverme dentro de la disidencia. Con una visibilidad mayor, por eso fui detenido muchas veces, amenazado de muerte, interrogado, encerrado. Soy escritor, poeta. Quiero vivir como un poeta, que hace un desayuno a sus hijos, puede leer un libro en paz, escribir un poema, pasear al parque… En Cuba estoy amenazado de muerte, secuestrado en la puerta de mi casa”, lamenta Rafael la situación actual de los escritores independientes en su patria. Rafael creció escuchando “no digas nada en la calle”, con dos máscaras, las cuales todos traen puestas. Entonces cuando se acercó a los escritores con pensamientos diferentes, se decidió por la lucha abierta en contra el régimen cubano. “Empiezas a ver todas las fichas como rompecabezas. Empiezas a ver la doble moral del otro lado, ya la conoces de familia, de amigos...ves el doble discurso”, explica Rafael.

¡Acabemos de tumbar a la dictadura!

La persecución de Rafael duele a los padres de Rafael, ya que su padre ha sido fiel al Gobierno cubano toda la vida, hasta que se retiró: “Te retiraste y te dieron una pata al trasero. Hasta que son útiles al sistema, pero cuando ya no, te percatan. Mi padre reconoció eso con lágrimas en los ojos, diciéndome que, yo tenía la razón. Que lo tiraron a la mierda, que no valía nada, que tenía solo un miserable retiro que no le alcanzaba para nada”, exclama Rafael. La situación económica de la familia de Rafael está muy apretada. “Tengo algunos libros publicados en Amazon, pero es muy vergonzoso, mi pareja Ana Rosa sostiene la casa. Me visto con poco, en ropa vieja, algunos amigos me regalaron ropa, es vergonzoso. Mis hijos viven de dinero de sus madres, solo les he podido dar el cariño”, entristece. En diciembre 2020 ganó el “Premio de Narrativa Reinaldo Arenas” con su libro “Sálvame si puedes”, tiene una cuantiosa suma de libros publicados en el extranjero. Rafael está agradecido al movimiento contemporáneo de los artistas independientes: “Hay muchísimo movimiento, están viendo la realidad, porque después de tantos años no hay dudas, todo es visibles en las redes sociales. La cantidad de escritores, artistas, músicos, que se han opuesto al régimen. Hay jóvenes que no deben a nada a nadie, tienen otra manera de ver la vida, de ver la libertad, de ver el escape”. Aunque Rafael siente pena y lástima por su patria bajo el régimen castrista, no pierde la esperanza de que el pueblo cubano se vaya a despertar y acabe de tumbar a la dictadura. Al final de su testimonio subraya que ¡“Cuba será libre”!

 

[1] Los lanzamientos de Escambray fueron los combates que realizaron las milicias del gobierno Fidel Castro para acabar con los movimientos contrarrevolucionarios que surgieron poco tiempo después de establecido el gobierno revolucionario. Más información aquí: https://kripkit.com/rebelin-de-las-montaas-del-escambray/

[2] La Revolución Cubana surgió en los años cincuenta y significó derrota del Gobierno de Fulgencio Batista y comienzo del Gobierno comunista de Fidel Castro el 1 de enero 1959. Más información aquí: https://mihistoriauniversal.com/edad-contemporanea/revolucion-cubana/

[3] El “periodo especial” es el nombre para la época de crisis económica en Cuba en los años 1990 causada por la caída de la Unión Soviética. Más información: https://www.elnuevodiario.com.ni/internacionales/491009-cuba-economia-periodo-especial/

 

Česká verze:

„Všichni neseme odpovědnost za svůj přístup, jaký ke společnosti zaujímáme, za to, co se kolem nás děje, za komunistický režim, za to, co provádí komunistická diktatura s lidmi a s umělci,“ provolává spisovatel a básník Rafael Vilches Proenza, který je držitelem několika národních i mezinárodních ocenění za literaturu, ale současně také pronásledován za svou kritiku kubánské vlády.

Vesnice v zajetí

Rafael Vilches Proenza se narodil 10. prosince 1965 na statku svého dědečka v obci Vado del Yeso v provincii Granma na Kubě. V květnu 1970 kubánská vláda přemístila obyvatele osídlení do jedné z vesnic v okolí. Takto vláda v oblasti pohoří Sierra Maestra přestěhovala několik rodin, aby se pojistila, že se nebude opakovat povstání jako to v pohoří Escambray[1], nazývané taktéž „Boj proti banditům“, ke kterému došlo v letech 1959–1965. „Fidel Castro odtamtud vyhnal všechny místní – venkovany, povstalce, zemědělce – a přemístil je do osídlení s domy, které dostali „zadarmo“, byla tam televize a lednice plná jídla, avšak venkovští obyvatelé museli opustit své domovy, zvířata, zkrátka všechno. V podstatě šlo o zneužívání,“ vysvětluje Rafael. Jeho matka vyučovala ve škole a otec obsluhoval traktory a pracoval na zafře (zafra je název sklizně cukrové třtiny a zároveň období, kdy tato sklizeň probíhá). „Jako malý jsem nebyl šťastný, nevybavuju si jedinou hezkou hračku, jenom sádrové panáčky. V dětství jsem trpěl značnou nouzí, a hlavně hladem. Bylo to velice smutné. Pro děti mají všechny tyhle věci jako jíst ovoce, zmrzlinu, chutné jídlo nebo slavit narozeniny velký význam. Nikdy jsem nemohl mít oslavu narozenin,“ vybavuje si Rafael a dodává: „Když nám chtěly naše matky koupit dárek ke Dni dětí, musely strávit celý den ve frontě, než jim bylo přidělené pořadí. Někteří měli možnost si místo v pořadníku koupit. Na moji matku vždycky vyšla hrozně vysoká čísla. Ve skutečnosti, když jste neměli jedno z prvních čísel v pořadí, neměli jste šanci dostat pěkný model auta, pistoli a podobně. To samé se dělo u oblečení.“

Koncentrační tábor pro mladistvé

Studia na střední škole Rafaela negativně poznamenala. Získal stipendium na částečném internátu a stejně jako ostatní žáci byl oddělen od své rodiny: „Ve věku, kdy děti potřebují své rodiče víc než kdy jindy, protože se proměňuje způsob jejich myšlení a celé jejich existence jako takové… bylo to jako být uvržený do vězení. Vězení pro mladistvé, doslova koncentračního tábora pro mládež,“ bolestně si vybavuje prudká léta svého dospívání plná násilí: „Byl strašné pozorovat vyučující, kteří spali s dívkami, co ještě nebyly plnoleté. Byla tam skupina, v jejímž čele stál jeden z učitelů, člověk měl strach v noci usnout,“ vypráví. V tomto období Rafael napsal svou první povídku, aniž by to byl záměr. Jeho matka byla skvělá vypravěčka příběhů, zatímco jeho otec vykládal vtipy, dědeček dokázal skvěle improvizovat a jeho strýc s tetou zase předváděli velice živé scénky. Takto v domě jeho prarodičů trávili večery. V roce 1980 začal studovat na Polytechnickém zemědělském ústavu, aby se z něj stal inženýr v oboru zavlažování a odvodňování. Jeho tehdejší přítelkyně, která byla zároveň jeho vyučující, mu začala dávat sovětské, americké, britské a francouzské knihy a časopisy. Rafael psal milostnou poezii, pročež mu zakázali vstoupit do literární dílny v jeho vesnici, protože se dostatečně nezabýval tématy kubánské revoluce[2].

Vojenská služba v Guantánamu

V roce 1985 Rafael nastoupil k výkonu povinné vojenské služby v provincii Guantánamo, kde strávil roky jako výzkumník a strážce při hraniční části obvodu města Caimanera. „Bylo to hrozně skličující, slyšeli jsme, jak vybuchují miny, ale nevěděli, jestli zasáhly leguána, vysokou zvěř nebo člověka. Byly to dva dost depresivní roky. Na druhé straně byli Američané, urostlí a silní chlapi, kdežto my jsme byli teprve chlapci, mladí a nevinní, bylo to kruté období,“ popisuje a dodává: „Hodně mladých vojáků se pokusilo přeplavat zátoku Guantánamo a podařilo se jim dostat na Námořní základnu Spojených států amerických, zatímco jiní se rozhodli proskakovat mezi minami, ovšem miny je buď zabily nebo zranily a oni zůstali invalidní.“ Poněkud ironicky jsou osmdesátá léta známá jako „zlaté období castrismu“. Dokonce i Rafael si tohle období takto vybavuje: „V těch letech jsem poprvé v životě zakusil, jaké to je nemít hlad. Lednice byla vždycky plná. Byl jsem strašně tlustý, v armádě jsme měli šunku a sýr z dovozu, zkrátka všechno. V tom období jsem žil daleko od všeho, co se dělo ve společnosti a co probíhalo v politice.“ Z vojny odešel po dvou letech v roce 1987 a chtěl studovat obor zemědělská energetika na přípravném vojenském ústavu, ale neudělal zkoušky. Rozhodl se proto studovat umělecký obor zakončený titulem licenciado na Akademii výtvarných umění v Santiagu de Cuba. Rafael je také absolventem Centra literárního vzdělávání Onelia Jorgeho Cardosy. V době svého pobytu v Guantánamu a v Santiagu de Cuba často navštěvoval knihovny a začal si sestavovat i svou vlastní sbírku knih.

Kdokoli z nás mohl zemřít hlady

Na začátku devadesátých let žil Rafael v domě svých rodičů spolu se svou první ženou a prvním synem. „Byly to příšerné roky, bydleli jsme v Santa Claře, kdokoli z nás mohl zemřít hlady. Moje matka dělala nemožné a když se vařila voda, naházela do ní rýži, fazole a cizrnu a z toho vytvořila hmotu, kterou jsme jedli. Můj otec už nepracoval jako traktorista, ale jako pomocník v pekárně, to nám zachránilo život,“ popisuje zvláštní období[3] neboli socioekonomickou krizi, která postihla celý ostrov. V roce 1996 napsal svůj první román Ángeles desamparados (Bezmocní andělé), který vyšel roku 2001 v Miami. Jeho kniha pojednává o tématu studentských stipendií, o uvěznění a o nefunkčním státním vzdělávání. Rafael začal docházet do literárních dílen, a dostal se tak do Provinčního centra knihy ve Villa Claře, se kterým spolupracoval dva roky. Následně se začlenil do Výzkumného centra kultury v provincii Holguín, než se stal předsedou Asociace Hermanos Saíz (AHS), vládní instituce, která se prezentuje jako nezisková organizace, v jejímž čele stojí Svaz komunistické mládeže. „V té době jsem už byl napojený na místní umělce, ale i další z celé země. V době před rokem 2000 nevycházely žádné knihy, byl v tom hrozný chaos a zkrátka to nebylo možné. Člověk usiloval spíš o to nějakou knihu vůbec napsat než ji vydat.“ vysvětluje Rafael a zároveň upřesňuje svůj názor na AHS: „Jde o způsob, jak mít umělce a spisovatele pod dozorem, když začínají. Manipulují s mladými lidmi… Netuším, jestli jsou vůbec seznámení s tím, jak to celé funguje, nebo se to děje za jejich zády.“

Chci žít jako básník

V roce 2000 Rafael odešel z Provinčního centra knihy, neboť si již začínal všímat manipulativního jednání, jaké se vůči spisovatelům a umělcům uplatňovalo. „Byl jsem svědkem hodně věcí, především naprosté absence úcty,“ vybavuje si. V roce 2009 byl Rafael kvůli přátelství a spolupráci s nezávislými autory a dalšími alternativními místy vyloučen z kubánského Svazu umělců a spisovatelů. V roce 2010 obdržel Národní cenu poezie. Rafael zdůrazňuje, že v té chvíli zahájil otevřený konflikt s kubánským komunistickým zřízením, proti kterému bojoval spolu se svými přáteli z řad intelektuálů. Začal publikovat v časopisech, které se vůči režimu vymezovaly, jako bylo mimo jiné Pensamiento Plural. „Zapojil jsem se do disentu. Byl jsem dost na ráně, proto mě taky několikrát zadrželi a vyhrožovali mi smrtí, vyslýchali mě a zavírali. Jsem spisovatel, básník. Chci žít jako básník, který svým dětem připraví snídani, může si v klidu přečíst knížku, napsat báseň, jít se projít do parku… Na Kubě mi však vyhrožují, že mě zabijí, a klidně mě můžou unést u dveří vlastního domu,“ naříká Rafael nad současnou situací nezávislých spisovatelů ve své zemi. Rafael vyrostl v duchu přikázání „venku nikomu nic nevykládej“, kdy musel mít člověk dvě tváře a na veřejnosti nasazovat masku. Proto když se sblížil se spisovateli, kteří uvažovali jinak, rozhodl se s kubánským režimem otevřeně bojovat. „Začnete vnímat, jak do sebe všechno zapadá. Vidíte to pokrytectví na druhé straně, nakonec to všechno už znáte z rodiny, od přátel… vidíte tu hru na obě strany,“ vysvětluje Rafael.

Nakonec se nám podaří diktaturu svrhnout!

Rafaelovo pronásledování trápí jeho rodiče, neboť jeho otec stál při kubánské vládě celý svůj život, než odešel do důchodu: „Odešli jste, a ještě si do vás kopli. Dokud systému sloužíte, jste jim dost dobří, ale jakmile už z vás nemají užitek, nejste nic. Můj otec si tohle uvědomil se slzami v očích a při tom mi říkal, že jsem měl pravdu. Že ho odkopli, že pro ně neměl žádnou hodnotu, že dostal jen mizerný důchod, se kterým nemohl vyjít,“ provolává Rafael. Finanční situace Rafaelovy rodiny je hodně napjatá: „Několik mých knížek je k dostání na Amazonu, ale není to nic moc. Živí nás moje přítelkyně Ana Rosa. Nemám moc co na sebe, jen samé staré věci. Někteří přátelé mi dávají oblečení, je to pro ostudu. Moje děti žijí z peněz svých matek, já jim můžu poskytnout jedině lásku,“ vypráví posmutněle. V roce 2020 získal se svým dílem Sálvame si puedes (Zachraň mě, jestli můžeš) Ocenění za beletristickou tvorbu Reinalada Arenase a vyšlo mu množství knih v zahraničí. Rafael pociťuje vděk vůči současnému hnutí nezávislých umělců: „Dělají toho opravdu hodně, uvědomují si, jaká je realita, protože po tolika letech už není o čem pochybovat, všechno se objevuje na sociálních sítích. To množství spisovatelů, umělců a hudebníků, kteří proti režimu protestují. Jsou tu mladí lidé, kteří nikomu nic nedluží a svůj život, svobodu a únik vidí jinak.“ Přestože Rafael pociťuje nad svou vlastí svíranou castrovským režimem smutek a lítost, neztrácí naději a věří, že se kubánský lid probudí a podaří se mu diktaturu svrhnout. V závěru svého svědectví vyzdvihuje, že „Kuba bude svobodná!“

 

[1] Vzpoura v pohoří Escambray byla potlačena výpady milic vlády Fidela Castra, které měly skoncovat s protirevolučními hnutími, jež vznikla krátce po ustavení revoluční vlády. Více informací najdete zde: https://kripkit.com/rebelin-de-las-montaas-del-escambray/

[2] Ke kubánské revoluci došlo v padesátých letech a znamenala porážku vlády Fulgencia Batisty a počátek komunistického vládnutí Fidela Castra od 1. ledna 1959. Více informací najdete zde: https://mihistoriauniversal.com/edad-contemporanea/revolucion-cubana/

[3] Zvláštní období je označení pro socioekonomickou krizi na Kubě v devadesátých letech dvacátého století způsobenou pádem Sovětského svazu. Více informací najdete zde: https://www.elnuevodiario.com.ni/internacionales/491009-cuba-economia-periodo-especial/

© Všechna práva vycházejí z práv projektu: Memoria de la Nación Cubana / Memory of the Cuban Nation

  • Witness story in project Memoria de la Nación Cubana / Memory of the Cuban Nation (Iva Fričová)