Enrique Figuerola Miranda

“En el segundo atentado, ya resulté ir preso, vino Obama a Cuba [En marzo de 2016, Barack Obama se convirtió en el primer presidente de los Estados Unidos en visitar Cuba desde 1928.] e hicieron un contrato, se hicieron un negocio allí, entre Raúl y Obama [los presidentes de ambos tiempos en aquella época – marzo 2016]. Liberaron a los que quedaban de los espías que estaban allí en los Estados Unidos y a cambio reconoció el Gobierno cubano a 53 prisioneros políticos. Dentro de los 53 prisioneros políticos yo fui el tercero en liberar y el 21 del dicho listado, y me liberaron como prisionero político como tal, me liberaron”.

“Esta otra fue en la prisión, ya estando en prisión por este mismo supuesto delito de atentado. En Boniato había, hay, existen, estoy consciente, que existen en este preciso momento, ciertas determinadas arbitrariedades. Yo convoqué a varios reclusos a nivel penal a una huelga general, con el objetivo de que cesaran todas estas arbitrariedades. Yo estando en huelga, yo fui trasladado hasta la otra prisión en Guantánamo. Que el mismo día me retornaron a la prisión de Boniato por la exigencia de mi esposa y por el reporte que hizo mi esposa de desaparecido. Pero el objetivo se cumplió, que me armaran las arbitrariedades, los maltratos, las torturas en contra los presos, en sentido general, no solo los presos políticos, en sentido general de los presos. O siento, o sentí en aquel momento que cumplió el objetivo de esta huelga de hambre”.

“Mi esposa y yo teníamos una cámara, entonces la decidimos coger imagen [cuando tomaron fotos de presuntos actos de violencia policial en 2012], para que el mundo supiera, todo lo que ellos hacían en contra de los activistas de “UNPACU” [Unión Patriótica de Cuba, organización opositora en Cuba, establecida en 2011]. Ese día nos detuvieron, detuvieron a mi esposa, la detuvieron, no sé, no recuerdo que cantidad de tiempo en la Modorizada [centro de detención en Cuba], y yo fui para los “Versalles” [centro de detención en Cuba], esa fue una ocasión. El día que hubo varias veces, me detuvieron en el Cobre” [ciudad en la provincia de Santiago de Cuba], porque teníamos la indicación de ir a desfilar al Cobre para exigirle la libertad a los prisioneros políticos, que se respetaran los derechos, que cesara la opresión en contra de ellos, no solamente de la oposición en Cuba sino del pueblo como tal. Innumerables las detenciones, innumerables, son innumerables”.